Luego de que se había cancelado el show del lunes 25 a último minuto, teníamos la moral por el suelo: haber viajado 6 horas en avión desde Perú, con tickets en primera fila y las emociones y expectativas al tope, una ensalada de camarones malogrados servidos en uno de los hoteles más exclusivos del DF (el Four Seasons) terminó por tumbar nuestras ilusiones y mandar a nuestro Chief al baño por más de 6 horas seguidas, según él mismo describió gráficamente en su cuenta de Instagram.
Sólo nos quedaba la esperanza de que no cancele el show del Martes 26, sabíamos que era poco probable que salga a firmar autográfos al hotel, pues estaba recuperándose, pero aun así como buenos fans estuvimos esperando afuera del Four Seasons hasta las 7pm, y luego nos enrumbamos al Metropolitan, con las esperanzas puestas en Dios y la Virgen de Guadalupe (a quién fui a agradecer al día siguiente por el milagro).
Noel salió al escenario a las 9:20 pm aprox. y tocó un show cumplidor, con algo de carencia de interacción con el público, pero lo que importaban eran las canciones, defraudo al no tocar Ballad of the Might I :( pero nos llevó al cielo con WHATEVER, sí, tocó WHATEVER!!!! la canción con la que me hice fan de Oasis a fines de 1994, más de 20 años atrás, y el concierto en sí fue un flashback de todos esos 20 años, como fan de Oasis y de esa música tan especial que Noel Gallagher ha hecho, hace y seguirá haciendo, y que es el soundtrack de mi vida. Con lágrimas en los ojos y con las emociones a flor de piel de principio a fin, repásamos 1 a 1 cada canción, y con una gran sonrisa al final lo único que queda decir es:
Gracias Noel!!!
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